Prometieron, para que se los vote

La actividad política lleva implícita a la condición humana como destinataria de su ejercicio y la justificación en el poder, está determinada por la obra pública que en ese sentido se emprende. Pero la democracia, indica que los ciudadanos guían a los gobernantes en la necesidad de su realización.

Los gobiernos militares muestran obras realizadas, pero nunca el ciudadano pudo participar en la necesidad y oportunidad. Lo que emprendían, lo hacían a su conveniencia económica circunstancial. De ahí que todos los gobiernos han hecho algo, pero pocos, pueden justificar que le sirva humanamente al conjunto. Muchos han pasado sin pena ni gloria, porque hacen lo que quieren y no lo que necesita la gente, a la que manipulan.

Realizan periódicamente costosas encuestas, para conocer por cual persona se inclinaría a votar la gente y por cual no, para actuar gubernamentalmente en sentido de conveniencia. Pero sería importante que esa técnica y recursos, se orientaran a saber el faltante de viviendas para cubrir las necesidades de los chivilcoyanos. El mismo criterio dentro de una ciudad en expansión, respecto a las cloacas y el agua corriente. O si el asfalto realizado, realmente integra a la sociedad o; si los servicios de salud y limpieza, responden cabal e igualitariamente, a los ingresos que posee el municipio, etc.

Cuatro años atrás, exhibían para tentar a que se los vote, el Plan de Desarrollo Estratégico que preveía entre otras, una maravillosa política municipal sobre el tránsito. Hoy el tránsito en la ciudad es caótico y demostrativo que aquellos políticos que lo impulsaban, no han dicho la verdad y que ese plan era solamente "un gancho" de campaña electoral. Una vez usado, no se volvió a hablar mas.

Respecto al tránsito, han mostrado en todo este tiempo, una sola actitud que es la de reprimir en contrario a la de educar, mientras, los accidente se suceden diariamente con consecuencias fatales porque no actúan, sobre sus causas.

Han mostrado palmariamente, que carecieron de política municipal sobre tránsito como obra humana que mejore la calidad de vida de los ciudadanos.

Al igual que la refacción de la Plaza Principal, mal encarado y no terminado.