¿Y la violencia moral?
La muerte violenta de un docente en circunstancias de reclamar por sus derechos y la importante movilización realizada repudiando el hecho, debe llevar a reflexionar sobre este desgraciado suceso.
No es la primera vez que la muerte en manos de las fuerzas de seguridad, alcanza a algún argentino que reclama por mejor calidad de vida. Tenemos en la historia, mucha sangre derramada por aquellos que lo único que tenían para perder era su vida y la perdieron.
Es fácil reflexionar repudiando la violencia física y realizar un análisis superficial buscando un responsable. Se escucharon las voces de los compañeros de la víctima, del gobernador, del presidente, de dirigentes gremiales, etc. y todos visualizaron la responsabilidad en el otro, proponiendo a su vez, la no violencia física.
Para aquellos con necesidades insatisfechas, las posiciones dadas por los que deben resolverlas, hacen presumir que no traerán respuestas satisfactorias sino mas bién, su profundización, dado que ninguno se refiere a la violencia moral a la históricamente son sometidos -por sus bajos sueldos- los trabajadores argentinos.
Últimamente se ha posicionado culturalmente, el "grito" de los reclamos, independientemente de la "razón" que se lleve en los mismos. Es así que en su nombre, se cortan puentes, rutas, se toman edificios, etc..
¿Realmente se hacen bién las cosas? Parece que no. Existen canales naturales en democracia como los partidos políticos, las organizaciones gremiales, etc. para instrumentar nuestra razón. Y que si en los mismos existen impedimentos humanos para llevarlas adelante, con la participación organizada, los enquistados en esos poderes se disolverán.
La educación nacional, "contenedora" en cambio de ser "formadora" de hombres libres, no puede existir sin la tradicional complicidad de los dirigentes gremiales. Si se tolera que la escuela alimente en vez de educar para la libertad, tendremos generaciones de hombres dominados para que siga gobernando este modelo inequitativo de exclusión social al que este peronismo, le resulta funcional. La identidad ideológica entre gobernantes y gremialistas, por la que ambos no cuestionar el modelo, hacen que sus intereses -aparentemente diferentes-, sean resueltos en su conveniencia y no para la conveniencia del conjunto a los que dicen defender.
2 comentarios
Luis Mariano -
Martin -
Ojala algun dia se instale en la consciencia colectiva el snetimiento de la participacion popular... Ojala desde el gobierno se abran las puertas del dialogo colectivo, y no, como sucede, se cierren y se diga dentro de la casa de gobierno "todo esta bien" "aqui no ha pasado nada"
Detras, hay una poblacion con reclamos... todos tienen algo que pedir, alguna necesidad insatisfecha, principalmente quienes menos tienen...
Pero hay que tener cuidado... cuando la demanda es de alimentos y trabajo... basta con dar una bolsa de alimentos o dinero (planes sociales)? Cual es la diferencia entre esto, y la generacion de puestos de trabajo y capacitacion reales?
La diferencia radica que implementando el primer metodo, se convierte a la poblacion en esclava de vivir pidiendo las limosnas y a la vez, se genera un circulo vicioso... se abandona la necesidad del trabajo y se comienza a "apretar" mas a las autoridades para que den mas... y mas... y esa poblacion, por supuesto, se convierte en poblacion laboralmente activa, pero no productiva...
Si se les da trabajo en vez de plata gratis, se instaura el nivel de consciencia propia en la poblacion, no el manejo de sus ideales... se instala la cultura de trabajo que en muchos puntos hace falta, de dejar de ser mantenidos del gobierno de turno y pasar a ser, autodidactas, dependientes de si mismos... con capacitacion de la poblacion, se logra que todo salga adelante, pero capacitacion en serio... en cambio, a mas ignorancia, mas esclavos, mas votos regalados, y mas bocas que mantener con el dinero de todos...