Simplemente una opinión o rompiendo el hielo.
Seguramente esta nota tendrá distintas interpretaciones, pero guiado en dar una opinión, se pretende brindar otro punto de vista, desde que la ciudadanía colocó a la U.C.R. en la oposición.
Consideramos particularmente que el radicalismo chivilcoyano, no le ha marcado claramente a la sociedad, los desatinos políticos y sus consecuencias, de los randazzistas en el poder. Tampoco, diseñó alternativas políticas propositivas. Los resultados electorales señalan a la dirigencia radical, como la que ha perdido el rumbo para la construcción de poder.
Randazzo desde sus inicios en el peronismo, ha variado su posición siguiendo a aquel que mejor viabilizara su ascenso político. Y a igual que todos, su accionar se encuentra vinculado al uso del dinero público como constructor de poder personal, manipulando piezas humanas según su conveniencia.
El radical es distinto pero, la falta en sus dirigentes locales de una cosmovisión política indispensable para ser referente partidario, llevó a que no resalte en ningún sector interno de la U.C.R., temática alguna en cuestiones a mejorar, cambiar o crear municipalmente.
Distinto hubiera sido, que los dos grupos relevantes que desde años vienen gobernando la U.C.R. de Chivilcoy, hubieran instado en todo ese tiempo, a compulsar ideas o generar estrategias de poder para diferenciarse entre sí y propender a elevar la calidad de discusión partidaria y no como pobremente ocurre, que se los distingue por sus nombres y apellidos.
Contrariamente a un perfil de demócratas, también son poco afecto a una integración sin seguidismo personal y por esta lógica, mantienen a unos pocos fieles en sus líneas pero el partido, perdió a valiosos hombres y mujeres que hartos de esas costumbres, lo abandonaron.
La “unidad” presentada recientemente, fue una pobre solución circunstancial para sortear el momento sin desgaste personal y orientarse ambos, a un camino provincial.
En la sociedad coexisten sectores silenciosos y otros no tanto, que al carecer de vínculos económicos o de servidumbre, rechazan las prácticas de la dirigencia peronista. Esos sectores mayoritarios por cierto, pretenden participar algunos o ser gobernados otros, por gente que transparente sus actos, se sometan a control ciudadano y que no acrecienten sus patrimonios a costa de administración pública.
Los radicales adeudan a los chivilcoyanos, la construcción de una arquitectura política sustentada en principios, valores e ideas que tengan en su origen y como destinatario, al hombre común. Ese camino lo empezamos a recorrer y en poco tiempo, seremos una verdadera opción electoral.
2 comentarios
Luis Mariano -
DERLIS LOPEZ -